Jaime Zúñiga, director del Club de Ejecutivos
Y llegaron los esperados 100 días. Tiempo autoimpuesto por los gobernantes que inician sus mandatos para demostrar que pueden ir traduciendo en hechos lo comprometido en discursos.
Hace mucho que es costumbre dejar de señalar las cosas negativas como tal, y más bien identificarlas como oportunidades de mejora. ¿Es lo mismo? Sí, es lo mismo, pero dicho de una manera que nos mueve hacia la acción y el positivismo para no quedar en el estancamiento de la frustración. Entonces, ¿qué tal han percibido ustedes estos primeros 100 días?
Al hacer un balance juzgamos desde los ojos del observador que cada uno es, de acuerdo con la propia expectativa, información y conclusión de la que cada uno es propietario. Es el momento también en donde nos ponemos a pensar en ese intercambio de opiniones con nuestros entornos en el transcurso de este tan simbólico plazo. ¿Vemos la famosa luz al final del camino? O por lo menos, ¿vemos un camino?
Mejorar: dice la RAE que se trata de “adelantar, acrecentar algo, haciéndolo pasar a un estado mejor”. Convengamos, sin la RAE mediante, que es aprovechar el momento.
En las últimas semanas se ha visto mucha difusión mediática de actividades, acuerdos, logros, que nos presentan como realizados en estos primeros 100 días. ¿Será que a muchos nos da esa sensación de premura por rellenar espacios sin mucho análisis? Obviamente todo paso hacia adelante suma, pero ¿están estos pasos alineados con un propósito? Es aquí donde algo que sí ha llamado mucho la atención es el manejo que se le ha dado a la cosa política, que sobresale significativamente de cualquiera de estos logros que se han promocionado. Tanta oportunidad de mejora tiene nuestro querido Paraguay, que el más corto de vista daría en el blanco si le tocara proponer un proyecto, un acuerdo que le convenga al ciudadano común.
Entonces, revisando las tarifas de Petropar vemos que, a 5 días de los 100 días, entraron en vigor nuevos precios, que esperamos puedan sostenerse más tiempo que en el primer intento. Lo malo sería no lograr esto sin subsidios.
Recuperar el mercado de USA para la carne, buen punto cuando hay alto impacto social. Optimización de los recursos para compra de medicamentos, consenso para nuevo proyecto de Ley de Superintendencia de Pensiones, reactivación de obras viales por más de USD 1.000 millones y varios otros temas incluidos en el informe de gestión nos hablan de muy buenas intenciones.
Pero, por otra parte, creo que estos primeros 100 días nos han dado una pauta –espero equivocarme– de cómo se va a manejar la agenda política. Y es aquí donde no nos alejamos de lo mismo de siempre, de la puja por el poder en detrimento del bien común. Es esta, a mi entender, la principal oportunidad de mejora que tiene este gobierno en el corto plazo. Marcar un camino distinto alejándose de los eternos allegados, sobre todo, si restan más que sumar. Está en veremos si la CN fue o no quebrantada en estos últimos días por cuestiones de interés sectorial.
Asumir el rol nunca es fácil, sobre todo si la delegación no es clara. Por eso es importante que el sector privado, el productivo, acompañe muy de cerca al Gobierno, insistiendo en que debemos mejorar a la primera oportunidad.