- Por Eduardo “Pipó” Dios
- Columnista
La ahora oposición, el aquelarre que cogobernaba sin ninguna vergüenza y total desparpajo con el impresentable Marito Abdo, evidentemente, no aprendió la lección.
O simplemente las neuronas que tienen las utilizan en un 100 % para el robo y el delirio.
Mucho se insiste en que Efraín es el responsable de la debacle del 30 de abril, pero al ver que sin Efraín están peor o igual, me hace dudar de la responsabilidad total del “Rey de las Tilapias”.
Los cachivaches que quedaron, los residuos de la famosa “dictadura de los 23″ de la difunta política Desirée, al servicio de la gavilla abdista, son aparte de bandidos, torpes e idiotas, y no paran en su desenfrenado intento por demostrar esas “dotes” día a día.
Siguen con el onanismo inocuo de los titulares de los “medios amigos”, que ya están utilizando los restos de la pauta del que se fue, para acompañar los últimos pataleos de los papanatas a quienes ensalzan, con escaso o casi nulo éxito.
Resulta que lloraban a mares porque “los niños pasarían hambre” sin recibir las meriendas podridas de la impresentable Celeste, ni estudiar en nuestras impecables escuelas, con los magníficos libros impresos por Miki Bragueta y don Antonio Corleone, el “Zar del Contrabando”, ni recibir los kits escolares chinos de cuarta categoría porque los amos de la Unión Europea no nos darían la plata, por algo que “no dice en ningún lado del acuerdo”. Ahora se plantea una adenda para eliminar “lo que no dice”, y uno diría: fantástico, si eliminan algo que no está, no eliminan nada y sigue todo igual, pero no... es un error borrar lo que no está, porque si no está lo que no está y se borra, es un “papelón internacional”.
Papelón internacional no son las 25.000 toneladas de cocaína que cayeron en todo el mundo y pasaron y se acopiaron en el Paraguay con la colaboración de su gobierno... esa es una pavada...
Pero bueno, es seguramente culpa del “copamiento” de los cargos que hace la mayoría parlamentaria electa por el pueblo, cosa que no sucede en ningún lugar del mundo.
Se nota que no aprendieron que el pueblo ya les dijo que se dejen de joder, que no los pueden ver y que no les creen nada, y seguirán en la misma hasta que dejen de ser 11 para ser 3 y luego desaparecer para reposar en el mismo asilo que la jefa Desirée. No hay caso, no aprenden.