Ayer estaba calculando hace cuánto tiempo que Efraín Alegre anda dando vueltas en campaña para presidente. Fue en el 2010 que Lugo le entregó los cupos de la administración que le correspondían por “contrato” al PLRA, como para que Efraín los repartiera entre todos los comensales liberales y no le rompieran las pelotas, pero este agarró y se quedó con lo más jugoso y los acostó, tapó y les dio el besito de judas de las buenas noches a Llano, Federico y demás deudos, y se quedó con la parte del león. Así es como él se atrincheró en el MOPC y a llenar de fieles servidores Copaco, Ande, Essap y las binacionales; y su cómplice, el célebre “Rafacoptero” Filizzola de Masi, cónyuge de la “Gata Flora”, se ocupó de saquear la Policía con su amigote, el “Lagarto Juancho”.
Lugo lo dejó hacer, como buen irresponsable, hasta que le pisó el callo y empezó a hablar de candidaturas para el 2013. Ahí, el presidente chateador dejó de lado algún “chas hot” con alguna modelí del momento y les mando a su casa con algún emoticón, (todavía no existían los stickers).
Con el rabo entre las piernas y los bolsillos llenos, esta pareja de atorrantes y traidores se marcharon con la sangre en el ojo. No pasarían dos años para que la “Gata” y El “Mago de las Tilapias” Alegre le pasaran la factura, participando activamente en el raje del obispo y la ascensión de “Florerico” Franco a los cielos del poder.
Las condiciones eran claras, Efraín quería ser el dueño de la candidatura del 2013 con su cómplice “Rafaelín”. Para eso, no quería internas, quería plata y el Estado al servicio de la campaña. Federico, con un hambre atrasado de 4 años, le dijo que sí a todo y ahí se largó nuestro “chabajador de la pacha”. Resumen, está en campaña desde el 2011... 12 años por ahí.
En estos, más de una década, con tres campañas, más las internas de su partido, tanto para las municipales como para el directorio, nuestro jubilado “de oro” (12.600.000 por mes de jubilación de privilegio, por 8 años de rascarse las que sabemos en el Parlamento) no ha sido capaz de mostrar un solo proyecto serio de gobierno, más que “Ande, a 5.000′i”. Después se juntó con la izquierda, la derecha, progres, comunistas, conservadores que no pasan de Santa Teresa y calle última, salvo para ir a Samber, y cuánto colorado fracasado de poca monta se le ofrece.
En la primera oportunidad, Cartes le pasó el plumero, y eso que nuestro emprendedor pescaderil tenía el Estado a su servicio de la mano de Federico; plata, presiones, cargos, aviones y lo que hiciera falta. Pero igual perdió. Se pasó 5 años mascullando su rabia mientras calmaba su hambre con su plato favorito, “tilapias al subsidio electoral” y la ayuda de los “socios” Desirée, Juancho y “Rafa”, que le acercaban su porción de torta de postre.
En el 2018, más vivo ya, fue en busca del traicionado Lugo, aquel que lo había mandado al córner, y luego él lo tiró de una patada a las graderías. Y el pastor, ladino como siempre, le prestó al ignoto e inocente “Leíto”, tampoco iba a tirarle uno de la Troika, porque sabía que perdían y no se iban a quedar fuera del Senado por 5 años. Perdió con Marito, candidato que no podía conseguir un solo voto fuera del Partido Colorado ni con macumba.
Ahora, nuestro “rey del pesque y pague” salió con el cuento de la Concertación. Les vendió espejos a los clientes de siempre. Juntó un grupo de partidos de maletín y les regaló cupos en una lista semisábana. Se ocupó de presionar con sus medios amigos a los pererî de Patria Querida y a algunos de sus correligionarios para ir a una ñembo interna abierta, que aparte de estar arreglada de antemano, ya que él siempre manejó el aparato y la plata del partido, se encargó de cargar las urnas para redondear la tarea de acomodar a los perros más fieles y leales.
Efraín no entiende y ni va a entender jamás que la política no es matemáticas. No hay 1+1=2, no porque los periodistas amigos a sueldo de sus financistas presionen y presionen a los demás candidatos, y estos terminen cediendo y bajándose, van a sumar sus votos a los suyos en una suma simple. Efraín genera más rechazo que aceptación, y como se rodea de lo más granado de la mediocridad y servilismo de la política paraguaya, que ya sabe que para contar con la “gracia” del Fûhrer, no hay que contradecirlo jamás, nadie se lo va a decir. Son ya doce años de perder el tiempo y el dinero público. De ser el dictadorzuelo de un partido hecho pelota, y se viene otra derrota en el horizonte. Solo que acá no habrá “amigos en el gobierno” que le tiren algún hueso para el caldo, y en el Tíbet dicen que hace frío.