- Por el Dra. Fabiola Román
- Columnista científica
El número de casos de infección por virus respiratorio sincitial (o sincicial) o VRS detectados actualmente genera preocupación y hasta una alerta epidemiológica en Paraguay. Se sigue observando un aumento sostenido de la circulación de dicho virus, según los informes del Ministerio de Salud. El VRS es un virus respiratorio común que usualmente causa síntomas leves, similares a los del resfriado. La mayoría de las personas se recuperan de la infección en una o dos semanas, pero el VRS puede ser grave, especialmente en bebés y adultos mayores.
El CDC señala que, en los Estados Unidos, el VRS es la causa más común de bronquiolitis (inflamación de las vías respiratorias pequeñas en los pulmones) y neumonía (infección de los pulmones) en niños menores de 1 año de edad.
Los síntomas de la infección por VRS usualmente incluyen secreciones nasales, disminución del apetito, tos, estornudos, fiebre y chillido del pecho. Estos síntomas se presentan entre el cuarto y el sexto día de la infección, y aparecen por etapas, no todos a la vez.
En el caso de los bebés muy pequeños, los únicos síntomas pueden ser irritabilidad, disminución de la actividad y dificultad para respirar. Casi todos los niños habrán tenido una infección por VRS antes de su segundo cumpleaños; sin embargo, especialistas han observado que, debido a las restricciones impuestas por la pandemia, los niños pequeños han retrasado su contacto con este virus. Ahora, con el levantamiento de las restricciones, se observa un aumento de casos en varios países.
El VRS puede propagarse a través de la saliva de las personas infectadas, por ejemplo, al toser o estornudar pueden caer pequeñas gotas en los ojos, la nariz o la boca de otras personas. También se puede dar el contagio al tocar superficies contaminadas con estas gotas, si luego uno se toca la cara. El VRS puede sobrevivir durante muchas horas en superficies duras como mesas y barandillas de cuna. Por eso es muy importante el lavado de manos y el aseo de superficies sospechosas.
Según información del CDC, las personas infectadas con el VRS suelen ser contagiosas durante 3 a 8 días; sin embargo, algunos bebés y personas con el sistema inmunitario debilitado pueden continuar propagando el virus incluso después de que dejen de mostrar síntomas, hasta por 4 semanas.
La mayoría de las infecciones por el VRS desaparecen por sí solas en una o dos semanas. No existe un tratamiento específico para la infección por RSV, aunque los investigadores están trabajando para desarrollar vacunas y antivirales (medicamentos que combaten los virus).
Según un artículo publicado en la prestigiosa revista científica The Lancet, en el 2019, 33 millones de infecciones agudas de las vías respiratorias inferiores fueron relacionadas con el VRS en niños menores de cinco años. Esto provocó un total de 3,6 millones de ingresos hospitalarios, 26.300 muertes hospitalarias y 101.400 muertes atribuibles al VRS. Esto representa aproximadamente una de cada 50, o el 2%, de las muertes anuales por cualquier causa en este rango de edad.
¿Como podemos prevenir el VRS?
Las medidas que pueden ayudar a prevenir el VRS, lavarse las manos con agua y jabón por lo menos 20 segundos, limpiar las superficies que se tocan frecuentemente, como las manijas de las puertas y los dispositivos móviles; si una persona tiene síntomas de resfriado, debe evitar el contacto cercano con otras personas. En particular, es recomendable evitar darse besos o la mano al saludar, así como compartir vasos y cubiertos.
“El VRS puede propagarse a través de la saliva de las personas infectadas, por ejemplo, al toser o estornudar pueden caer pequeñas gotas en los ojos, la nariz o la boca de otras personas. También, se puede dar el contagio al tocar superficies contaminadas con estas gotas, si luego uno se toca la cara”.