En la sesión del viernes pasado, si bien oficialistas y diputados aliados coyunturales del Gobierno, lavaron un poco la cara al abochornado ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, quedó constancia de que el mismo aplazó al Ejecutivo en su política de seguridad interna, pero además se confirmó que es un charlatán caradura y marioneta de quienes pactaron poder con el Presidente de la República.

El diputado Freddy D’Ecclesiis, que de narcopolítico al parecer, pasó a ser amigo del ministro, en su afán de defenderlo durante el juicio que se debatía terminó ratificando más la charlatanería de Giuzzio.

D’Ecclesis recordó candente sesión en la que, de la boca del entonces senador Arnaldo Giuzzio su nombre se incluyó en la lista de narcopolíticos; es decir, políticos vinculados al narcotráfico. La acusación fue en el 2014, primer período en la Cámara Baja de D’Ecclesiis.

En defensa de Giuzzio ante las críticas por las alborotadas acusaciones que acostumbra hacer el mismo y como uno de los blancos de las rimbombantes denuncias que le recordaron en plena sesión del juicio político sus colegas por Presidente Hayes y Central, D’Ecclesiis trajo a colación esa denuncia que lo apuntó como narcopolítico, intentando justificar que en ese momento el hoy ministro del Interior, fue manipulado, “fue utilizado”. Al respecto, “con amigos así, para qué quieres enemigos”, dice un refrán.

Para justificar a Giuzzio, el diputado D’Ecclesiis señaló que en su momento este le dijo en guaraní: “El ministro de la Senad, Luis Rojas, me trajo diputado, yo cumplo en denunciar en mi rol de legislador, como parte de la comisión del narcotráfico, yo no puedo ir a investigar lo que vos hacés”.

En resumen, el diputado D’Ecclesiis dijo que Giuzzio repitió un libreto, en este caso atribuido al ex ministro Rojas. El legislador solo reconfirmó lo que muchos ya sabemos, el hoy ministro del Interior es un especialista en hacer ruido, se cuelga de asuntos sensibles, ataca para luego desentenderse.

Apegado al salario público, Giuzzio siempre hizo su show. Habría que ver quién le pasa el libreto en el show de esta temporada. ¿Quién lo “utiliza” esta vuelta?

El salvataje de Giuzzio por la mayoría de los diputados, no fue por su capacidad ni liderazgo. Los diputados que salvaron al ministro del Interior lo hicieron por lo mismo que alegó como excusa el diputado D’Ecclesiis para defenderlo y es porque lo están utilizando como un disparador contra el enemigo político.

Esa es la realidad, a Giuzzio lo salvó su papel de zoquetero útil a los intereses de los pescadores del 2023.

No importan los 46 sicariatos en su gestión, ni los 55 asaltos del mes de enero, ni la decena de robos mediatizados en las últimas 24 horas, lo que importa es que el ministro del Interior es un “valiente” tiroteador que, a pesar de los años, sigue desempeñando muy bien su papel de Giuzzio, “el utilizado”.