- Por Eduardo “Pipó” Dios
- columnista
Desde fines del siglo pasado que actúan los grupos violentos armados, primero en San Pedro, la famosa Banda de Choré, que no era precisamente una banda de sertanejo, sino el primer golpe del brazo armado del Partido Patria Libre, al que le había ido como el culo en las elecciones, entonces decidieron “tomar el toro por las astas”. Claro que los chetos del partido no tenían ganas ni tiempo ni, hay que reconocer, huevos, para meterse en cosas más pesadas, que implicaran algún riesgo, por eso se dividieron.
Una cosa es putear y luchar desde la radio, panfletos y, hoy, desde un teclado en las redes, y otra más jodida, empuñar armas y arriesgarte a ligar un tiro o irte preso. Ahí nació el EPP, un grupo de ultraizquierda, entrenado por las FARC, financiado por ONGs de fachada con dinero de Venezuela, o similares, y también con secuestros, extorsión y con apoyo político de los sectores autodenominados “progresistas” de la política paraguaya, que siguen pensando que nos gobierna Stroessner y el imperio yanki, por lo que cualquier enemigo del Gobierno y, por supuesto, de “los yankis”, es amigo y compañero.
Este romanticismo pelotudo, trasnochado, que no entiende que Rusia ya no es la Unión Soviética comunista, sino que es una seudodemocracia, gobernada con puño de hierro por Putin, donde justamente se comen crudos a los que piensan y siguen con el discurso de los años 50. Que Cuba está más cerca del modelo haitiano de pobreza, que de ser el paraíso donde todos son felices, sanos, educados y cantan canciones de Pablo Milanés (otro que se rajó también). Que mientras ellos se escandalizan porque en Chile hay pobres, en la Venerada del comandante Chávez y el colectivero Maduro, lo raro es, no ser pobre y cagarse de hambre. Y encima te roban, secuestran, y te apalea y encarcela el mismo régimen déspota que tanto aman, los de afuera.
Pero volvamos a nuestra isla sin mar, que según leí en estos días, no es capitalista, sino que todo es corrupción nomás, donde no hay izquierda ni zurdos, o si hay, son poquitos nomás y ni se notan, y menos aún conspiran para llegar al poder, ¡faltaría más! Según el sesudoanálisis que tuve la dicha y fortuna de leer, confieso que no lo terminé porque tantas pelotudeces juntas me marearon, aquí el EPP es producto de la mafia del narcotráfico o algo por el estilo. Como decía otro artículo, una especie de obituario, una necrológica digna de un héroe caído por la patria, del prócer “Alejandrito”, abatido hace unos días, son víctimas de las circunstancias y por supuesto siempre son los políticos corruptos los que los “empujan a tomar las armas” para matar inocentes, civiles, policías o militares, o ponerle una granada en la boca a tu tía, porque no está tan de acuerdo en darle un AK-47 a la nena de 13 años para ir al monte, y hacerla reventar delante de sus hijitos. Al fin y al cabo, cada uno canaliza su frustración como mejor le parezca, unos se enojan, otros siguen trabajando y otros revientan tías meteretas. En resumen, el EPP existe pero no existe, o sea durante los 4 años del gobierno de Lugo sí existieron, pero después y antes no, solo son narcos que se disfrazan, de aburridos, así se les llena de policías y militares la zona y tienen que gastar más y perder más cargas, pero es su plata y pueden hacer lo que quieran.
Tampoco la izquierda, los zurdos, el zurdaje, los comunistas existen, o sea son “poquitos y no tienen casi votos”. Los piqueteros y los invasores rurales y urbanos son simplemente gente con problemas comunes que se unen para violar los derechos de propiedad privada y libre circulación de onda, nadie los banca, los alienta, los organiza ni les da protección política. Tienen suerte, ponele.
Los 7 senadores del Frente Guasu, más los dos satélites del PDP deberían ser los 9 de 45 y no los 23 o 25 de 45 que gobiernan usando la Constitución y las leyes como papel higiénico. Pero ahí sí, hablemos de los otros corruptos y oportunistas que están juntando platita y se alían con el que ponga más. Ahí aparecen Lilian, “Cachito”, Afara, Apuril y unos cuantos liberales que están juntando sus últimos dólares porque andá a saber si hacen rekutu o no.
Es cierto, la zurda, a lo mejor, no existe, pero gobierna.