El 2020 reposicionó a la televisión en Paraguay y el mundo como el medio de comunicación de mayor aceptación y entrada a las casas, por supuesto que la pandemia y las cuarentenas estrictas tuvieron mucho que ver. ¿Cómo harán los canales para capitalizar este momento?

La gran audiencia del año quería saber todo alrededor del covid, desde la situación en China primero, Europa después, vecinos y por supuesto los casos locales. Los medios televisivos hicieron –en gran medida– un gran trabajo de apoyo comunicacional al Gobierno paraguayo cuando había muchas más dudas que certezas sobre el impacto del virus en nuestra realidad. Pero creer que esa fórmula es sostenible es mentirse. La fatiga es real y principalmente la necesidad de estar alejado del televisor, ya sea por salud mental o simplemente porque no hay tiempo, hay que trabajar.

Lo lógico es que el 2021 vuelva a poner las cosas en su lugar; desde lo sanitario con la aparición de vacunas, así como desde el tiempo que le dedican las personas a los medios de comunicación. Y allí puede estar la clave, el medio que sepa cómo distribuir los contenidos que siga generando de manera diferenciada puede sacar ventaja. Hace años que los medios de prensa no solo compiten entre sí, sino contra plataformas que están en busca de nuestra atención, y en ese proceso de adaptación apostar todo a la vieja “caja boba” es un sinsentido.

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El “streaming”, es decir el consumo vía internet, o el “on demmand”, es decir el consumo en el momento que uno decida, seguirá en aumento porque es el formato que nos queda más cómodo a los consumidores y en el que mejor se puede hacer delivery de un producto digital. ¿Por qué? Porque se puede identificar a la audiencia.

Los canales de televisión están en una búsqueda frecuente a nivel local de lograr una gran audiencia, y han habido casos de programas que lo lograron, sea por las figuras, sea porque empatan en la idea con muchas personas, o simplemente por la polémica. Pero ante la gran cantidad de canales existentes, no todos pueden apuntar a lo mismo. Dicho más simple, sería mucho más lógico tratar de construir desde “muchas audiencias pequeñas”, antes que desde una gigante.

Quienes no interpreten esta ecuación y consideren que este tipo de comentario representa una crítica nada más, serán los responsables del declive de sus canales. La publicidad ya busca datos; precisos, no genéricos, sino específicos, sobre horarios de consumo, demografía, tiempo de uso, cantidad de compartidos, alcance, comentarios, y por supuesto retorno de inversión. Todo esto está disponible, el desafío es que los canales evolucionen para empezar a ofrecer estas herramientas a quienes puedan ayudar a sostener económicamente las operaciones.

Recientemente una empresa paraguaya de streaming, Kili, recibió un premio e inversión por parte de Cervepar para impulsar el proyecto. No es un dato aleatorio, es un gigante de un rubro de alto consumo apuntando a nuevas opciones. El 2021 tendrá muchas preguntas sobre el futuro, y el covid no será un monotema, por tanto será mejor tener un menú variado que un solo producto estrella.

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