La Agrupación Montada de la Policía Nacional ayudó en la tarde y noche del miércoles a los tres Reyes Magos –llegados de oriente– a culminar con éxito el largo recorrido que tenía por objetivo la entrega de los obsequios a los niños y niñas de la Comunidad Neocatecumenal de la Parroquia Sacramento de la Recoleta, ubicada en las intersecciones de Sacramento y Mariscal López, de Asunción.
Como en la zona no hay arena, sino más bien pavimento, los llegados de oriente dejaron sus camellos y montaron los caballos que fueron proveídos por la Agrupación Especializada. Los Reyes lucieron sus tradicionales túnicas, generando el asombro de niños y adultos, que no desaprovecharon la ocasión para tomar fotos.
Para la alegría de los más pequeños –cuyo asombro arrancó cientos de sonrisas y emociones– los Reyes cargaron las grandes bolsas, apoyados por una importante comitiva que también llevó los presentes, y fueron los que ayudaron a entregar los obsequios a los niños.
"Sacarle una sonrisa a esa inocente carita es algo que no tiene precio", señalaron los agentes que se prestaron para representar a los tres Reyes Magos, llegados de oriente para entregar los regalos a los pequeños que se portaron bien durante el año.
Según el cristianismo, los Magos eran los visitantes que, tras el nacimiento de Jesús en Belén, acudieron desde el extranjero para rendirle homenaje y entregarle regalos: oro, incienso y mirra. Con el tiempo se adoptó la costumbre de celebrar al mismo tiempo el día de la Epifanía (el 6 de enero) y la festividad de los Reyes Magos.