La Fiscalía inició una investigación contra el cura de Limpio, Silvestre Olmedo, por el hecho punible contra la autonomía sexual. Una joven de 20 años denunció que el sacerdote la manoseó en sus partes íntimas. La Iglesia Católica también indaga lo sucedido.
La fiscal Luciana Ramos investiga el caso y comentó a la 780 AM que la denunciante, Alexandra Torres, será sometida a un examen psicológico. Indicó que una vez que tenga el resultado de la prueba decidirá la suerte del cura. "Estoy esperando el informe para tomar una decisión", expresó.
Ramos sostuvo que la joven radicó la denuncia en la Fiscalía porque no obtuvo respuesta de las autoridades eclesiales. La víctima conversó con el arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, y este supuestamente solo le pidió orar por el padre Olmedo. Es decir, no activó el protocolo establecido por la Iglesia para casos de acoso o abuso.
"La joven acudió al sacerdote para que le ayude a realizar una nota, porque pertenece a la Pastoral Juvenil. Allí comentó que el padre le acarició la espalda y le tocó las piernas. No quiere hablar mucho. Ella indica que hicieron caso omiso a su denuncia, por no tener respuesta radicó la denuncia ante el Ministerio Público. Envié un oficio a la Iglesia Católica para saber si hizo la denuncia", declaró la agente. El padre se expone hasta 10 años de cárcel, según la investigadora.
Paralelamente, la Iglesia indagará el tema y nombró al padre Óscar González para dirigir las pesquisas. El martes pasado, cuando se le preguntó si Olmedo acosó a la joven, González comentó que el propio denunciado le dijo que cometió "algo indebido".
En conversación con La Nación, la estudiante de la carrera de Arquitectura de la UNA narró la situación por la que atraviesa. Según la denuncia, el religioso le llegó a tocar el pecho. Incluso ella no sería la única víctima, pues al hacer público su caso otras tres chicas le contaron de acosos que sufrieron por parte de Olmedo.