- Por Gabriela Rojas Teasdale
- @GabyTeasdalePresidenta de la Fundación
- Transformación Paraguay
La noticia de que Donald Trump fue electo como nuevo presidente de Estados Unidos sorprendió al mundo. Muy pocos creían en esa posibilidad luego de una de las campañas más polémicas y reñidas en la historia del país. Lo cierto es que, nos guste o no, luego del acto electoral del 8 de noviembre Trump emergió como nuevo líder de los estadounidenses y como nuevo líder mundial.
Más allá de las diferentes reacciones y opiniones, que respetamos en un marco de tolerancia y espíritu democrático, es importante identificar lo que los votantes han querido decir. Porque las acciones hablan y muchas veces en voz alta.
Estados Unidos quiso algo diferente porque la gente está cansada del sistema político actual, de los mismos discursos, los mismos resultados, los mismos errores cometidos una y otra vez. Hoy, las personas apuestan por el cambio, buscan algo distinto, quieren soluciones. Y para eso necesitan nuevos líderes.
Es importante que quienes aspiran a administrar no solo las naciones, sino también las empresas y organizaciones entiendan que las personas ya no nos conformamos, no nos resignamos, sino que reconocemos nuestra importancia y nuestro derecho a buscar el bienestar común, la igualdad y las mejores oportunidades para cada uno.El mundo busca nuevos modelos, necesita líderes que se conviertan en superhéroes y estos héroes son personas valientes, comprometidas, que sueñan y trabajan por un mundo mejor. Martín Luther King fue un ejemplo con su memorable discurso "I have a dream", que movilizó a miles de personas que creían y se identificaban con su mismo sueño. A pesar de los sacrificios y de poner incluso en riesgo su propia vida, él decidió convertirse en un héroe, decidió no callar, se animó y apostó por el cambio.
Lo que el mundo necesita son líderes que se conviertan en modelos, en un ejemplo a seguir. Líderes que inspiren, que crean en las personas y que tomen acción para hacer de nuestro entorno un lugar mejor. Líderes que trabajen para que la paz, la solidaridad y la igualdad se impongan a la indiferencia, el engaño, la estafa y la ausencia de humanidad. Líderes que quieran marcar la diferencia agregando valor a las personas y poniéndose al servicio de ellas.
Y líderes que puedan identificar el valor de las personas para desterrar de una vez la mediocridad y el conformismo de nuestras vidas.