La situación de Venezuela es analizada por la máxima autoridad del organismo. Afirma que algunos países del Mercosur tienen una postura consistente con la realidad venezolana.

SILDE OPORTO

Periodista

sildeoporto@lanacion.com.py

El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, realizó una corta visita al país para participar de un evento organizado por la Secretaría de Acción Social (SAS). Paralelamente a su participación en la actividad, Almagro habló de la situación de los derechos humanos y la corrupción en los países de la región.

En este sentido, se refirió a la situación de la República Bolivariana de Venezuela, gobernada por Nicolás Maduro. Habla de la aplicación de la Carta Democrática Interamericana y el proceso de la misma, que se está llevando en la organización internacional.

-¿Cómo analiza la situación social en la región actualmente?

-Tenemos logros y resultados importantes en materia social. Por ejemplo, hoy por primera vez el continente tiene más clase media que pobres, ese es un paso importante, las políticas de inclusión en cuanto a la discriminación han dado resultados positivos en nuestros países.

El hecho de que cada país tenga ministerios o secretarías de desarrollo social y que todos los países hayan cumplido con con prácticamente la totalidad de los objetivos del milenio, salvo el de mortalidad materna que prácticamente ha sido el debe en alcanzar los objetivos del milenio.

Pero todavía seguimos teniendo una cantidad de pobres demasiado alta en el continente, son 67 millones de pobres, tenemos 70 millones de personas del continente viviendo en pobreza extrema. Tenemos todavía niños sin acceso a educación y tenemos por lo tanto muchísimas cosas que resolver.

-¿Cómo analiza la situación democrática en los países de la región?

-Es algo muy difícil. Tendríamos que hacer un análisis país por país. Vemos que hay países que están muy bien, países que no están tan bien, y hay algún país que no está nada bien.

Ha habido una evolución en la situación y lo imperativo que es la democracia para nuestras sociedades, pero también es muy importante trabajar en dinámicas de principios y valores de la democracia, y adaptar los sistemas políticos a las nuevas prácticas de la ciudadanía y la democracia, y a las nuevas prácticas democráticas que hacen que la responsabilidad de los políticos con la ciudadanía sea mucho más directa.

La democracia también depende de lo variable de democratización, y cuanto mejores condiciones de igualdad y equidad tengamos en nuestras sociedades, mejores serán las condiciones para ejercicios civiles y políticos.

-¿Cómo trabaja la Organización de los Estados Americanos para fomentar la democracia en los países regionales?

-La Organización de los Estados Americanos tiene instrumentos jurídicos del sistema interamericano y tiene mecanismos para hacerlos efectivos.

Hay temas que estamos atacando, específicamente que han sido enfermedades dos bacteriológicas que ha tenido la democracia en el continente, uno de los temas es la corrupción, ahí tenemos la Convención Interamericana de la Lucha Contra la Corrupción.

Otro de los temas que estamos abordando es la financiación de los partidos políticos, con la creación de una ley modelo que esperemos que vaya siendo adoptada con las condiciones nacionales que pueda tener cada país.

Y tenemos los mecanismos emblemáticos, como la Carta Democrática Interamericana, que prevén acciones concretas en los casos de alteración del orden constitucional, de ruptura del sistema democrático de los países u otras variables, incluidos otros ejemplos como el estado de excepción.

-Cómo secretario de la organización, ¿cuáles son sus prioridades?

-Mis prioridades tienen que ver con los cuatro pilares de la Organización, que es democracia, derechos humanos, la seguridad multidimensional y el desarrollo integral de los países. En cada unas de estas líneas de trabajo tenemos acciones concretas.

Las que tienen que ver con el tema de la democracia tienen una mayor difusión pública, pero no hemos descuidado en ninguna línea de acción y creo que la organización tiene que trabajar todos los fenómenos en paralelo porque tiene institucionalidad y capacidades técnicas como para hacerlos.

-Con respecto al cumplimiento de los derechos humanos en la región, Venezuela es una de los países con duros cuestionamientos actualmente en este ámbito. ¿Cuál es su opinión al respecto?

-Nosotros hemos hecho un informe de 132 páginas, en el que hemos señalado problemas institucionales como el desconocimiento del Poder Legislativo de la Asamblea Nacional en Venezuela, como la existencia de presos políticos, esos presos políticos además son torturados y son sometidos a tratos crueles e inhumanos.

Hemos hablado también de la necesidad de respetar el derecho constitucional que tiene el pueblo venezolano de ir a un referéndum revocatorio. Hemos hablado de la necesidad de abrir un canal internacional de asistencia humanitaria para atender la grave crisis social y humanitaria que tiene el país.

Ese informe marca un momento difícil desde el punto de vista institucional, económico y social para Venezuela, una dimensión de crisis que se ha ido profundizando, que tiene, por ejemplo, la corrupción como uno de los elementos distintivos.

-La OEA está ahora en el tercer paso de la aplicación del artículo 20 de la Carta Democrática. ¿Cuál es la acción una vez terminado los cuatro pasos?

-El artículo 20 de la Carta Democrática es en un proceso gradual, y ese proceso gradual implica la necesidad de construir soluciones.

La evaluación colectiva que hacen los países tiene que ver específicamente con la construcción de soluciones para estos casos. En algunos casos son buenos oficios, en otros casos son misiones diplomáticas, en otros casos son acompañamientos como se ha propuesto con la creación de un grupo de amigos para atender este tema.

Entonces, todo eso está antes que una eventual sanción; lo que queremos es construir soluciones y resolver los problemas. Esperamos llegar a ese escenario que las soluciones sean posibles y hoy estamos trabajando para hacerlo viable.

-Se habla mucho de un quiebre entre los Estados miembro del Mercado Común del Sur, como representante de una organización, ¿cómo ve esta situación que se generó dentro del bloque regional?

-Como representante de una organización de una organización me cuesta mucho hablar de otra organización. Sí, hemos visto que algunos países han expresado una forma muy consistente con la realidad de Venezuela, que hemos señalado en nuestro informe y sus planteos están muy en consonancia con lo que hemos dicho con respecto a la situación política, institucional, humanitaria y económica. Entonces, simplemente los países tomarán las decisiones que correspondan, en función de los instrumentos jurídicos propios que tienen todos.

-¿Corresponde que un gobierno en la situación de Venezuela asuma la presidencia de un grupo regional como el Mercosur?

-Eso hoy lo está considerando el Mercosur y yo no voy a prejuzgar una situación que está a consideración de los Estados del Mercosur.