La justicia argentina le dio la razón a los consumidores que presentaron batalla contra el brusco aumento de tarifas de los servicios públicos que impulsó el gobierno de Mauricio Macri y frenó los incrementos del gas en las provincias de Río Negro y Neuquén (sur). De esta forma ya son nueve las provincias que suspendieron los aumentos que en promedio rondan entre el 500 y el 700%. En algunos casos alcanzó el 2.000% en la fría Patagonia.
En la provincia de Río Negro la Cámara Federal suspendió la aplicación del incremento por tres meses y ordenó a la empresa proveedora Camuzzi Gas del Sur a refacturar los consumos a los valores de marzo, previos al aumento.
La Cámara Federal justificó su decisión en que el aumento no fue sometido a discusión en una audiencia pública.
OLA DE RECLAMOS
Una ola de reclamos en los tribunales recorre Argentina en rechazo a los reajustes de tarifas de luz, gas y agua con cientos de recursos de amparo presentados. El propio ministro de Energía, Juan José Aranguren, lamentó "la judicialización" de estas medidas. Esta semana la justicia de Córdoba (centro) también frenó el aumento de gas, al igual que en jurisdicciones de Jujuy, Salta, San Luis, Chubut, Santa Cruz y Buenos Aires.
El gobierno pidió a la población que pague los aumentos y espera que la Corte Suprema se expida sobre el tema para detener los reclamos judiciales que incluyen manifestaciones callejeras y protestas frente a las empresas que prestan el servicio. A los aumentos se suman también reajustes del precio de transportes y una suba del 30% del precio de los combustibles desde enero.
Macri impulsó las subas bajo el argumento de que las tarifas estaban retrasadas y culpó de ello al gobierno anterior de la ex presidenta Cristina Kirchner (2007-2015).