Argentina y Brasil se muestran en contra de la asunción de Venezuela en la presidencia pro tempore del Mercado Común del Sur (Mercosur), respaldando así la postura de Paraguay, con lo que Uruguay, de momento, queda solo con esa intención.
Aunque oficialmente no se sabe qué pasará con la idea uruguaya, la de entregar la presidencia aparentemente en una reunión de cancilleres, las negociaciones dentro del bloque están candentes, teniendo en cuenta que el plazo para el traspaso de la presidencia se debe realizar en este julio.
En este sentido, el presidente de Argentina, Mauricio Macri, ya anunció que la intención de su gobierno es quedarse con el mandato en el bloque regional, dejando de lado el orden en el cual corresponde a Venezuela.
En contrapartida, plantea que Uruguay continúe en la presidencia. Sin embargo, el gobierno de Tabaré Vázquez se muestra firme en su postura de cumplir con la legalidad del bloque.
"Nosotros vamos a presidir los meses que vienen por delante el Mercosur, impulsándolo en esta dirección", dijo Macri durante una conferencia de prensa en la embajada argentina en la Unión Europea el pasado lunes, según las publicaciones del medio argentino La Nación.
Por su parte, el gobierno brasileño encabezado por Michel Temer solicitó ayer ante Uruguay, a través de su canciller José Serra, que la definición de dar o no la presidencia a Venezuela sea postergada hasta el mes de agosto.
"La presidencia tiene que ser fruto de una unanimidad", señaló Serra luego de la reunión con el presidente uruguayo Tabaré Vázquez y el canciller Rodolfo Nin Novoa. La declaración de Serra se encuadra en la misma postura que la paraguaya.
Serra agregó que en agosto se vence el plazo que dio el Mercosur para que se cumplan los requisitos normativos del bloque, por lo que Brasil propone esperar este resultado para tomar una decisión.
Mientras tanto, Paraguay continúa con su postura firme de que Venezuela no debe asumir la presidencia por la situación en la que se encuentra el país caribeño. El canciller nacional, Eladio Loizaga, reiteró en varias oportunidades que el país que asuma el mandato se debe encontrar en una "paz plena".