El exdeportista, leyenda viva del fútbol mundial, el hombre que enmudeció al Maracaná en la final contra Brasil en 1950 al anotar el gol de la victoria uruguaya 2-1 sobre los locales, murió de un paro cardíaco, dijo su esposa Beatriz vía telefónica.
Ghiggia, de 88 años, quien luchaba hacía diez años contra un cáncer, había ingresado en la noche a un hospital local, confirmó su esposa.