Representantes de importadoras del Paraguay manifestaron su desacuerdo contra las resoluciones 133 y 134, suscritas por el Ministerio de Salud, el pasado 24 de marzo, que permitirán desde el próximo 6 de abril a los pequeños importadores de frontera ingresar productos país por un valor limite de US$ 10.000 mensuales. El gremio reclama que tal resolución impone normas muy fáciles de cumplir, generando una desigualdad de exigencias ante los importadores formales.

El reclamo fue hecho ayer en la sede del Centro de Importadores del Paraguay (CIP), donde estuvieron presentes gremios empresariales, integrados por la Cámara Nacional de Comercio y Servicios del Paraguay (CNCSP), CIP, Cámara Paraguaya de Productos de Domisanitarios, Higiene personal y Afines (Caedhpa), Cámara de Importadores de Perfumes y Cosméticos (Caimpeco), Cámara de Representantes de Importadores de Productos Farmacéuticos, Tocador, Domisanitarios y Afines (Crifa), Cámara Paraguaya de Proveedores (Capro) y la Cámara Paraguaya de Productos y Equipamientos Médicos Odontológicos y de Laboratorios (Cappem).

El vicepresidente de la CIP, Luis Petersen, explicó que además de la desigualdad de exigencias que se impone con las nuevas resoluciones, las mismas generan una preocupación acerca del no cumplimiento de las normas sanitarias, poniendo en riesgo la salud del consumidor final.

"Como, por ejemplo, el respeto de la cadena de frío, la protección de los embalajes, y mismo que sean productos originales. Esto podría estar afectando a los consumidores", indicó.

BENEFICIADOS

También agregó que esta nueva regla beneficiará a los importadores de frontera, ya que los mismos se podrán valer de los trabajos e inversiones que realizaron los importadores formales para registrar un producto y luego ingresar al país.

"La resolución hace que si alguna empresa ya importó y ya tiene el registro, eso sirve de aval para que otro importador se prenda de esa situación y pueda importar ese producto. Está formando una iniquidad", dijo.

Por otro lado, el representante de la Caedhpa, Silvio Codas, también manifestó la no aprobación de la resolución, sosteniendo que por más que su empresa se encuentre entre el sector de pequeño o mediano porte, está teniendo un gasto aproximado de US$ 1.000 en registro de cada producto, para así poder cumplir con el marco regulatorio que le imponen.