La novia estuvo muy bonita con un diseño de Ana de Rickmann; era un vestido de estilo clásico hecho en gasa de seda natural y guipure decorado con perlas; el pelo llevó una tiara de encaje y perlas, y en las manos, un ramo de rosas de color vainilla y gypsóphilas preparado por la decoradora Karina Doldán. En tan especial momento, los contrayentes estuvieron rodeados del afecto de familiares y amigos quienes, tras la misa, acompañaron a los nuevos esposos a celebrar su unión con una elegante fiesta, en el local de eventos La Mansión. El lugar fue decorado siguiendo una línea vintage con románticos detalles. Del servicio gastronómico se encargó Asado Benítez, en tanto que Silvia Franco montó la mesa de dulces con sus productos de La Oma. Multifiestas le puso buen ritmo a esta velada nupcial.