Hace años vecinos que residen entre 29 y 36 proyectadas de la ciudad de Asunción, están pidiendo ayuda para que se repare uno de los tantos puentes que cruza sobre el arroyo Ferreira y también se asegure las viviendas que están a punto de ser arrastradas por las aguas. Piden que el plan de reparación ingrese en el presupuesto de la Nación.
Según la licenciada Nancy López de Kochalka, presidenta de la comisión vecinal San José Obrero, desde hace meses junto con otras comisiones vecinales están conformando un equipo técnico para demostrar que la falta del muro de contención y el puente sobre el arroyo Ferreira representan un problema socio-ambiental.
“Estamos sufriendo desde el barrio San Vicente, parte del Republicano y L. Petit hasta la confluencia con el río Paraguay. Todas las familias cuentan con títulos de propiedad que solicitan a las autoridades el financiamiento para la obra y que se puedan ingresar al presupuesto de la Nación del 2024″, explicó la mujer.
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Los pobladores indicaron que este problema es antiguo y que con cada lluvia el estado del puente empeora y las familias temen quedarse sin casas.
“Esto también afecta a las veredas donde pasan muchos niños que van a las escuelas. Hace 26 años sufrimos por nuestro puente, por donde cruza el brazo principal del arroyo”, detalló una de las vecinas.
Agregó que el puente es muy transitado porque es utilizado por pobladores de Lambaré como de Asunción, pero que también es el más dejado por las autoridades.
“Es un peligro para la comunidad y para todos, porque pasan conductores de ambas ciudades. Pedimos que reparen el puente y la vereda para peatones”, resaltó.
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Por su parte, Miguela Fretes, que reside en la zona hace 59 años, indicó que antes podían cruzar el arroyo a pie, pero que con el paso del tiempo las aguas fueron arrastrando los sedimentos. “Las aguas se llevaron todo, hasta el quincho de mi casa. Tuvimos que mandar a hacer el cementado, pero no sabemos hasta cuándo va a durar”, apuntó.
Agregó que nunca va a olvidar que una amiga suya que vivía en 22 Proyectadas, tuvo que abandonar el barrio porque las aguas se llevaron su casa. “Muchas familias se fueron así y eran propietarias, es injusto eso porque pagamos impuestos. Pedimos ayuda al Ministerio de Obras Públicas para solucionar”, resaltó.
Beatriz Ledesma, que reside en 33 Proyectadas, afirmó que su casa ya está al borde del arroyo y que cada lluvia los pobladores se mantienen en zozobra. “Hace 48 años que vivo acá y que ahora estamos al borde. Queremos que nos hagan caso, que se apruebe el proyecto para mejorar nuestro barrio”, puntualizó.
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