El juez penal de Garantías, Gustavo Amarilla, ordenó el arresto domiciliario de Marcelo Ortiz, imputado por homicidio culposo y exposición al peligro en el tránsito terrestre, luego del accidente en el que falleciera Aurelio Escobar, chofer de la línea 27. El magistrado dispuso también otras medidas, como la prohibición de salir del país. El imputado tampoco puede cambiar de domicilio y una fianza real (inmueble) de G. 300 millones más G. 50 millones de fianza personal que asumió su defensora.

Durante la audiencia de imposición de medida la defensa alegó que como los hechos por la imputación son delitos, entonces solicitó la aplicación de medidas alternativas a la prisión. A continuación, se presentó una fianza real, y personal, por lo que el Ministerio Público solicitó la aplicación del arresto domiciliario para el imputado. El joven se retiró del Palacio de Justicia sin brindar declaraciones a los medios de comunicación.

Según la investigación fiscal, el 1 de enero, aproximadamente a las 7:30 horas, Marcelo Manuel Ortiz, quien dio positivo a la prueba de alcotest con 1,03 g/l, iba al mando de una camioneta Kia Sportage y protagonizó un accidente sobre las calles General Díaz y Montevideo de Asunción. Aparentemente, Ortiz cruzó el semáforo en rojo, lo que habría causado que el chofer de la línea 27 "San Lorenzo" se viera forzado a realizar una brusca maniobra y finalmente impactara contra un local comercial de nombre "Lumiluz".

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A raíz del fuerte choque, el conductor del colectivo, Aurelio Escobar, salió despedido del interior del bus quedando tendido sobre el asfalto con graves lesiones.

Luego fue derivado al Hospital del Trauma, donde horas después se confirmó su deceso. Además del chofer, quedaron heridas otras dos personas que se encontraban dentro del ómnibus. La Fiscalía pidió un plazo de 5 meses para realizar la investigación y presentar el requerimiento conclusivo.

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