Un comerciante que tenía orden de exclusión del hogar desde 2016 mató a su ex pareja, a la hija que tenían en común y luego se suicidó. El hombre, totalmente fuera de sí, también disparó contra un policía, a quien hirió en el abdomen.

La madrugada del 21 de enero no será fácil de olvidar para los vecinos del barrio Capellanía, de San Lorenzo, una ciudad ubicada a unos 15 kilómetros de Asunción, en el departamento Central. Cerca de las 00.30 de hoy, en la vivienda de la familia de María Inés Vallejos Fŕageda, una comerciante de 64 años, vecina del lugar, empezaron a escuchar gritos desesperados, tanto de la dueña de la casa como de su hija, Mónica Raquel Santacruz (31 años), una enfermera que también vivía allí.

Tras esos gritos, los vecinos alertaron al servicio de emergencia policial 911, que derivó el caso a la Comisaría N.º 15 de Barcequillo. Los policías de esta unidad policial llegaron en contados minutos. Pasó poco tiempo y los vecinos ya no escuchaban gritos ni peleas después de una serie de disparos de armas de fuego. Temían lo peor. Los agentes policiales llegaron al lugar pero ya fue tarde. En el balcón del primer piso de la casa, desde la calle, se podía ver el cuerpo de las dos mujeres tendidas en el suelo. Había mucha sangre.

El oficial primero Alberto Báez, de la Comisaría 15, se acercó a la casa, empezó a preguntar si alguien estaba dentro. Logró ver a un hombre dentro de la vivienda. Cuando Báez se acercó hasta el portón, con la intención de abrir e ingresar al patio, desde la puerta se encendió un caño de metal y una bala le impactó en el abdomen. El proyectil, de calibre 38, traspasó su chaleco y le afectó el cuerpo. El policía fue rápidamente auxiliado y a estas horas ya está fuera de peligro, según la información que dieron en la Comisaría de Barcequillo.

Para esa altura ya fueron designados dos patrulleros al lugar. Un contingente de al menos 10 efectivos policiales prácticamente acorralaron la casa. Hasta entonces, el escenario era que dos mujeres yacían en el balcón y había un hombre violento dentro de la casa, armado. Pero de un momento a otro, se escuchó otro disparo que venía desde dentro de la casa. Los policías forzaron el portón, ingresaron y encontraron en la entrada del hogar al hombre tendido en el suelo, con la pistola cerca. Un charco de sangre cubría su ropa y parte del piso.

El hombre que de acuerdo a las evidencias y hechos mató a las dos mujeres y luego se suicidó fue identificado como Emiliano Santacruz, de 69 años, de profesión comerciante y que tenía una orden de exclusión de hogar desde 2016. Esto significa, que no podía estar en dicha vivienda por una orden judicial. Justamente, esta medida tomada por el Juzgado obedeció a que Emilio Santacruz tenía denuncias en su contra por violencia doméstica. Las víctimas de Emilio, doña María Inés Vallejos, fue su pareja años atrás, durante muchos años, mientras que Mónica Raquel Santacruz era su propia hija.

El caso conmocionó a todo un barrio y viene a sumarse a la triste nómina de feminicidios que viene ocurriendo en apenas un mes de arrancar este año. En el 2017, Paraguay cerró con una cifra de casi 50 feminicidios en un año. El caso de este doble homicidio de Capellanía quedó a cargo de la fiscala Genoveva Figueredo.