Un Estado nunca debe dar la espalda a las necesidades de la gente, sino todo lo contrario, tiene que enfrentar las adversidades y velar que las instituciones estén sobre todo al servicio de los más carenciados, en la afanosa búsqueda de una igualdad social.
Las necesidades en nuestro país son grandes debido a la carente planificación y el poco interés demostrado por gobiernos anteriores a los graves problemas sociales, priorizando intereses personales o grupales.
A decir del Gobierno, esto ha cambiado y ahora se enfoca decididamente, de manera seria y comprometida, a dar solución a los problemas sociales que afectan a miles de compatriotas.
En ese sentido, a modo de ejemplo, cabe apuntar que se informó que durante el primer mes del año el Gobierno invirtió 243 millones de dólares en el área social, de los cuales 54,1% fueron financiados con recursos del Tesoro, mientras que el 44,4% fue cubierto con fondos institucionales y solo el 1,5% restante fue saldado con dinero proveniente del crédito público. Así lo informó el Ministerio de Hacienda.
En este contexto, cabe apuntar que senadores de la oposición y colorados disidentes se oponen férreamente a la emisión de bonos que corresponden al presente ejercicio. Uno de sus principales argumentos sostiene que los recursos provenientes de ese instrumento financiero son utilizados solamente para el pago de deudas externas y que no tienen incidencia en los programas sociales ejecutados desde el Gobierno Nacional. También aseguran que tendrán efectos nefastos en el presupuesto del Estado, porque en el futuro el país no podría cumplir con dichos compromisos financieros.
Es de señalar, como apuntó un artículo publicado ayer en este diario, que con la traba que estos legisladores intentaron anteponer con la negativa de autorizar la emisión de bonos, los programas sociales fueron los principales proyectos afectados por falta de recursos.
Una buena noticia fue que la Corte Suprema de Justicia se pronunció al respecto, indicando que los bonos son completamente legales y que pueden ser comercializados sin inconvenientes, lo que supone una tranquilidad tanto para el Gobierno como para los interesados en los bonos.
De acuerdo a los informes proporcionados por el Ministerio de Hacienda, la inversión en el área social alcanzó en términos nominales en guaraníes 1 billón 400.000 millones. Esta cifra indica un incremento del 28,7% con respecto a lo destinado a dicho rubro en el mismo mes del año pasado.
Los datos proveídos por la cartera de Estado señalan también que el 53% de los recursos utilizados por las entidades de la administración central fueron orientados a la inversión social, mientras que el resto de los recursos se distribuyó entre los demás sectores como la administración gubernamental, seguridad, económico y deuda pública.
Las cifras dan cuenta de que de cada 100 guaraníes utilizados, 53 fueron invertidos en la población a través de los programas sociales. Los principales sectores sociales beneficiados con los desembolsos en el mes de enero del 2017 son: educación, que recibió el 33% del monto total; promoción y acción social, con 31,8%, y salud con 17,3%, entre otros.
A estos números, que aún deben ser mejorados, es bueno sumar otra buena noticia. El Poder Ejecutivo anunció la licitación del proyecto de la avenida Costanera Sur en Asunción, que tendrá unos 7,9 kilómetros de extensión que comprenderá desde el cerro Tacumbú al cerro Lambaré. La inversión asciende a 180 millones de dólares, lo que generará de nuevo un movimiento económico importante en el área de construcción y consecuentemente en diversos sectores de la población. La licitación se hará bajo la modalidad de la Ley 5.074, conocida como "De llave en mano", por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
El ambicioso emprendimiento, además de la Costanera y defensa costera, construirá unas 5.000 viviendas sociales para los pobladores del Bañado Sur. En este sentido, se detalló que a partir de mayo o junio ya se iniciarán las 30 hectáreas de refulado y que permitirá iniciar la construcción de las viviendas a finales de año en los meses de noviembre o diciembre.
Estos números sobre las inversiones en el área social y las inversiones que vienen, indudablemente son sumamente positivos en un momento en el que algunos sectores asumen una irresponsable postura al intentar frenar todo, haciendo prevalecer sus intereses electorales antes que los de la gente.