El gerente ejecutivo de la fundación Tesãi, Jorge Frutos, negó categóricamente que el estudiante de medicina Bruno Garay Saldaña haya sido desvinculado de la institución porque no accedió a firmar la planilla pro-enmienda. Explicó que el verdadero motivo fue la no renovación de contrato por una cuestión de reestructuración del servicio y adecuación de la fuerza laboral.

Dijo que en la fundación existen 30 funcionarios que tampoco firmaron, pero que siguen trabajando sin ningún tipo de inconveniente. "El convenio social que tenemos con Itaipú establece contratos de trabajo por tiempo determinado: un año y se renuevan en caso de que la persona continúe", refirió.

Remarcó que "en el caso de Bruno Garay Saldaña se decidió no continuar con su trabajo por motivos de readecuación de servicio. Estamos reduciendo costos, optimizando los recursos disponibles en el convenio social".

Acotó que el mencionado funcionario ya había trabajado en la fundación Tesãi en el 2015 y que entonces fue desvinculado tras agredir a golpes a un compañero. "Hay testigos de eso, e inclusive la víctima tuvo que ingresar por urgencias", precisó.

El directivo sostuvo que Garay Saldaña tiene un carácter irascible y explosivo, lo que le generaba problemas en sus relaciones interpersonales dentro de su ámbito de trabajo. "Es una persona temperamental. Acá la gente le conoce (…) Luego de ese incidente él constantemente me llamaba, me decía para ayudarle, para ver si había un puestito, para darle otra oportunidad", relató.

Frutos agregó que ante la insistencia y la situación familiar del joven, se reconsideró su caso y se le hizo responsable de un puesto administrativo en el Hospital Materno Infantil Los Ángeles, dependiente de la fundación Tesãi. "Hasta ahora nos asombra que haya hecho acusaciones de ese tipo. Nos ajustamos a las leyes, lamento que le haya dado otro cariz a esta situación ", expresó el directivo.

Con relación a la planilla pro reelección vía enmienda constitucional, sostuvo que tiene información de que la planilla estuvo circulando en los pasillos de la institución y que según los datos, de 150 funcionarios, 30 aproximadamente no firmaron "Esa gente sigue trabajando sin ningún problema, jamás hubo presión ni coacción de ningún tipo. Nadie esta condicionado a nada, en Tesãi y menos a mantener sus puestos de trabajo", enfatizó.