Cinco días y más de 3.000 expositores después, la edición 50 de CES, la mayor feria de electrónica de consumo, cierra las puertas con las guías maestras de lo que ofrecerá 2017 marcadas. Gary Shapiro, director de la asociación que organiza un encuentro que toma por completo, hoteles, transporte y centro de convenciones de Las Vegas, no ha ocultado su alegría por la llegada del presidente Donald Trump a la Casa Blanca.
Tras una semana de competencia por acaparar la atención de los visitantes, estas son las líneas de producto que durante 2017 intentarán hacerse con la cartera y atención del consumidor. Como siempre, escasearon precios y fechas concretas de lanzamiento. Mucho espectáculo pero pocos datos fiables.
Ford fue pionera en asistir al CES. Mark Fields, su presidente ejecutivo lo hizo aconsejado por Bill Gates hace más de 10 años. Desde entonces no fallan, han conseguido que el resto de fabricantes de Detroit sigan su camino. La empresa que inventó la cadena de montaje vaticina que el coche del futuro no se poseerá, sino que será por suscripción. También que en 2021 el modelo autónomo, sin conductor, será una realidad. BMW, por primera vez, dejó ver una de sus berlinas que funcionará gracias a la inteligencia artificial en lugar de contar con un piloto humano.
El martes por la noche Faraday Future, presentada en la edición de 2016 y con capital chino, presentó su primer modelo inteligente y totalmente eléctrico. El FF91 se puede reservar por 5.000 dólares pero se ignora la fecha de entrega o precio final. Sí se sabe que es más veloz que cualquier deportivo, de los de gasolina, o que los actuales vehículos de Tesla. Mercedes piensa en un sistema de transporte híbrido, que combine sus furgonetas con los drones de Matternet, una startup nacida en la Singularity University, cofundada por la latina Paola Santana. Reparto de punto a punto con una solución ingeniosa.