Emerson Dutra. Corresponsal
El violento suceso se registró ayer, al filo del medio día, sobre la transitada calle Brasil del barrio Virgen de Caacupé, cerca de la terminal de ómnibus de Pedro Juan Caballero.
La asistente fiscal Celia Gómez se encontraba en el Palacio de Justicia realizando gestiones como diariamente hacía y al salir se encontró con el suboficial Cristino Centurión, custodio del fiscal adjunto de Caaguazú, Justiniano Cardozo, quien se ofreció acercarla a la Fiscalía. Subieron a un Fiat Strada y se dirigieron hacia la terminal de ómnibus, donde el uniformado debía dejar una encomienda.
En ese sitio fueron sorprendidos por 2 sicarios que iban en motocicleta, quienes sin mediar palabras les dispararon. La asistente fiscal recibió varios impactos que le ocasionaron la muerte; el suboficial reaccionó y enfrentó a tiros a los matones, que intentaron huir, pero el policía los persiguió y chocó la moto. Uno de los sicarios, Julio César Romero (33), cayó y fue arrastrado por por el Fiat. Al tratar de escapar, fue herido a balazos por el suboficial. Su cómplice logró escapar.
Malherido, el delincuente fue trasladado al Hospital Regional donde fue operado. "Tiene pérdida de masa encefálica y su estado es delicado", explicaron los médicos, quienes luego confirmaron el deceso. Romero fue por mucho tiempo integrante de la banda de músicos de la municipalidad local. Según los informes, el objetivo de los sicarios era el suboficial de la Policía Nacional, Cristino Centurión.