Lorenzo Agüero. Corresponsal.
La fuerte tormenta, acompañada de copiosa lluvia, se desató la noche del martes y duró apenas algunos minutos, pero fue suficiente para causar serios daños materiales, especialmente en la ciudad de San Pedro de Ycuamandyyú, capital del departamento de San Pedro.
En los diferentes barrios dejó centenares de árboles caídos, cables sueltos de la Ande, además numerosas viviendas fueron destechadas, incluso una capilla del barrio San Francisco de la ciudad se destruyó por completo a consecuencia de la caída de un árbol.
Varias cuadrillas de Ande trabajaron arduamente para restablecer el suministro de la energía eléctrica en los lugares afectados.
Pablina Cabrera, pobladora del barrio San Francisco, mencionó que "hago un llamado a todas las autoridades para que se vuelva a reconstruir nuestra capilla, también muchas casas de familias muy pobres de este barrio fueron destechadas. Lo que más necesitamos ahora son chapas, víveres. Este barrio siempre estuvo en el olvido, nunca las autoridades municipales ni de la Gobernación vinieron para darnos ayuda".
Esperanza Agüero, pobladora del barrio Inmaculada de San Pedro de Ycuamandyyú, indicó que "es muy crítica nuestra situación. La tormenta deja varias casas dañadas. Tenemos mucho perjuicio y pedimos la ayuda de la SEN".
Según datos, también numerosas comunidades rurales del distrito fueron severamente afectadas por la tormenta. Aún no se tiene un registro oficial de la cantidad de viviendas que fueron dañadas.