Tras no lograrse los votos necesarios, el Consejo Superior Universitario (CSU) rechazó por tercera vez consecutiva la intervención de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (FIUNA). Ante esta decisión, los estudiantes decidieron salir con sus pupitres a la calle para manifestarse.
La intervención estuvo a cuatro votos de aprobarse. De los 44 consejeros presentes en la sesión extraordinaria, 30 votaron a favor, 12 en contra, un voto en blanco y otro nulo. La moción por la intervención perdió, ya que se necesitaban 34 votos, que completaban los dos tercios de 50 miembros totales del CSU.
En medio del conflicto, el decano Éver Cabrera aseguró que solo si pierde el movimiento oficialista que lo respalda en las elecciones renunciará como decano como lo exigen los estudiantes. La estructura oficialista maneja la facultad, por lo que tiene grandes chances de ganar los comicios que en este momento no se realizan por una acción judicial.
Pese al conflicto y a un malestar creciente en la FIUNA, además de estar paralizada, administrativa y académicamente, desde hace 109 días, Cabrera sigue empeñado en buscar la solución de forma interna con el diálogo. Propuso su renuncia como acuerdo en caso de levantarse la medida cautelar, que dispuso el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), y se desarrollen las elecciones.
Si en esas elecciones la chapa oficialista no logra ganar las elecciones, se apartará del cargo. "Si los estamentos que responden a la institucionalidad de la Facultad de Ingeniería, ya sea de los docentes, graduados o alumnos, no llegan a ganar o no llegan a tener la mayoría yo me retiro de la FIUNA, eso implica mi renuncia.
No hay forma de gobernar una institución si uno no tiene mayoría, es práctico y es lógico", dijo Cabrera. Admitió que si no cuenta con el respaldo del Consejo Directivo, prefiere apartarse. Los miembros de ese anillo son: el director académico de Ingeniería Gustavo Riart, el docente Juan Balsevich, Víctor Villasboa, entre otros.