El directorio del CBVP-Amarillo reconoció ante la Fiscalía que jamás compró los 1.100 cascos F1 que aparecen facturados por la firma Circumpunto SRL -de Daniel Aquino Rivas, directivo de los bomberos- y que fueron presentados ante Hacienda como parte de la rendición de cuentas del 2015.
Así dice parte del descargo que hizo el directorio del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP-Amarillo) ante la Fiscalía, en el marco de las investigaciones por presuntas irregularidades financieras y administrativas que La Nación viene publicando desde hace más de dos meses.
El CBVP-Amarillo recibe cada año un aporte del Estado en su calidad de entidad sin fines de lucro. En tal sentido, debe justificar su balance anual y enviar luego al Ministerio de Hacienda, encargada de hacer las transferencias, para demostrar en qué fue utilizado el dinero público.
En ese contexto, desde el 2014 hasta junio de este año, el directorio de los bomberos amarillos recibió del Estado unos G. 9.777 millones. En base a documentos y a las "aclaraciones" que hacen los propios miembros del directorio, lo que se presentó ante Hacienda en el 2015, hasta ahora, deja muchas dudas sobre la transparencia con la que se manejó el dinero de la ciudadanía en esta institución.
El directorio de bomberos, encabezado por Rafael Valdez Peralta, no tuvo otro camino que reconocer ante la Fiscalía -el caso está a cargo de Ángel Ramírez, que tiene ahora como coadyuvante a Alba Delvalle- que efectivamente jamás se compraron los 1.100 cascos F1, de la marca MSA, que aparecen como adquiridas ante el Ministerio de Hacienda en la rendición de cuentas que hizo la institución correspondiente al presupuesto del 2015.
Estos cascos supuestamente fueron vendidos al CBVP por la empresa Circumpunto SRL, que facturó ese año por valor de G. 967 millones como proveedora de los bomberos. La firma pertenece al comandante Daniel María Aquino Rivas, actual miembro del directorio de la institución.
De acuerdo con los datos comerciales de Circumpunto SRL, se trata de una empresa "de intermediación en servicios comerciales y servicios personales", y aparece a nombre de Daniel María Aquino Rivas, incluso, el número de teléfono que figura en las facturas que fueron entregadas a los bomberos es el mismo que utiliza Aquino Rivas como corporativo dentro del CBVP.
Apenas 92 cascos comprados
En el informe presentado por el directorio como descargo, figura que la institución adquirió 92 cascos en todo el 2015. De esta cantidad, 30 supuestamente fueron comprados de la firma Circumpunto SRL (de las 1.100 que negoció con los bomberos).
En la planilla en la que figura la distribución de estos casos por compañía, salta un dato interesante: De los 90 cascos que se compraron el año pasado, 15 se destinaron nuevamente para los miembros del directorio y de las 97 Compañías registradas, apenas 11 recibieron estos cascos.
En el detalle de los equipos adquiridos por el CBVP-Amarillo en el 2015, a través de la empresa Circumpunto, se puede leer la adquisición de 1.110 cascos F1, de la marca MSA; 1.644 cotonas (chaquetas de combate) y 1.604 jardineras (pantalón de combate).
También aparecen guantes para incendios, mongas, equipos de protección personal, botas de combate de incendios e incluso un servicio de transporte y fletes. Todos estos equipos fueron facturados y aparecen dentro del balance que el Cuerpo presentó al Ministerio de Hacienda.
Facturas no abonadas
En un extraño ensayo, el directorio intenta dar una explicación sobre las razones de la existencia de las facturas de Circumpunto SRL (por valor de G. 967 millones) en la rendición de cuentas del año pasado ante Hacienda. En ese sentido, menciona que estos documentos -las facturas- no fueron abonadas en su totalidad por el CBVP-Amarillo ya que no se recibió el 100% de los equipos.
"En común acuerdo entre las partes, comprador y vendedor, emitirían las facturas correspondientes a la transacción acordada, y una vez acreditada por parte del MH (Ministerio de Hacienda) se procedería a la cancelación de las facturas, previa recepción de los equipos; siguiendo siempre el contexto de las negociaciones, teniendo en cuenta el tardío desembolso de los fondos por parte de la entidad estatal", señala en parte el documento.
Lo que explica el directorio deja lugar a más dudas, que certezas. Es difícil entender cómo Circumpunto SRL aceptó dar sus facturas sin haber recibido todo el dinero.
Igualmente ¿cómo es que el directorio presentó estas documentaciones ante Hacienda sin hacer las aclaraciones correspondientes?. Además, una vez que se recibió el dinero ¿qué hizo el directorio con estos fondos? Son respuestas que solamente la labor fiscal podrá definir, si avanza en sus investigaciones.