Río de Janeiro, Brasil | AFP.
El presidente de los Comités Olímpicos Europeos fue arrestado este miércoles en Río de Janeiro en conexión con la reventa ilegal de entradas para los Juegos Olímpicos, anunció la policía brasileña. Agentes de la policía "cumplieron una orden de búsqueda y captura contra Patrick Joseph Hickey, de Irlanda, miembro del Comité Olímpico Internacional" (COI), precisó la policía en un comunicado. "Fue arrestado", confirmó un portavoz policial.
El Comité Olímpico de Irlanda, que Hickey dirige, se limitó a indicar que "busca total claridad en la situación antes de hacer más comentarios".
La prensa brasileña informó que Hickey fue arrestado en un hotel donde se alojan dirigentes olímpicos en Barra da Tijuca, cerca del Parque y la Villa Olímpicas. Según el portal G1, Hickey se sintió mal durante su arresto y fue trasladado a un hospital.
La detención del alto dirigente del COI parece estar vinculada a la desarticulación de una red internacional de reventa ilegal de ingresos para los Juegos de Rio, la semana pasada.
El irlandés Kevin James Mallon, jefe de la empresa de hospitalidad THG Sports, una compañía que tenía autorización para revender entradas de los Juegos de Londres-2012 y Sochi-2014, fue arrestado el 5 de agosto en Rio, día de la ceremonia inaugural de los Juegos, y acusado de reventa ilegal de ingresos.
Mallon es "uno de los directores de la empresa inglesa THG, cuyo presidente James Sinton fue preso en 2014 por estar involucrado en la 'mafia de los ingresos' para la Copa del Mundo" en Brasil, dijo entonces la policía.
Una intérprete de la empresa THG también fue detenida.
La policía indicó que se incautó 781 entradas "que eran comercializados por valores altísimos". THG vendía entradas para la ceremonia inaugural por 8.000 dólares, cuando el precio oficial más alto era de 1.300, explicó el inspector Ricardo Barbosa en una conferencia de prensa.
Mallon fue detenido en un hotel de Barra da Tijuca, en la zona oeste de Rio, cuando vendía las entradas a unos 20 compradores que también fueron conducidos a la comisaría para declarar.
THG vendía "plazas particulares para eventos muy demandados como la final del fútbol, las ceremonias de apertura y de cierre de los Juegos. Estas entradas pueden tener un valor enorme. Con estos ingresos la empresa hubiera podido ganar 10 millones de reales (3,15 millones de dólares)", dijo Barbosa.