El ruido de los festejos de Islandia, la sensación de la Eurocopa 2016, la confianza del local Francia y el trauma de Alemania ante Italia serán los grandes atractivos de los cuartos de final de la competición europea.

Sí, Islandia, aunque el planeta fútbol aún no lo cree. El alumno superó al profesor y los islandeses siguen de fiesta en las calles de Reikiavik. Otros aún no quieren despertar del sueño mágico.

Uno es el relator islandés Gudmundur Benediktsson. "Es el final. No me despierten nunca más. No me despierten jamás de este sueño de locos. ¡Islandia... va al Stade de France... el domingo! Francia-Islandia. Inglaterra se vuelve a casa", gritó al micrófono en Niza.

En la primera de las dos jornadas de descanso camino a los cuartos de final, Joachim Low, exigente y obsesivo seleccionador de la Mannschaft, salió a atacar el problema de frente, de cara a los cuartos ante la Azzurra.

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La última caída data de las semis del 2012, con Joachim Low sentado en el banquillo. Fue 2-1 para Italia, conducida por un Andrea Pirlo magistral.

En Le Haillan, Bélgica prepara su choque del viernes de cuartos ante Gales en un clima de cierta tensión, pese a los buenos resultados y Polonia, con perfil bajo, enfrentará a la selección de Cristiano Ronaldo, Portugal, que viene de empatar tres partidos y ganarle en el alargue a Croacia.

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