El centrista PMDB buscaba el lunes unanimidad para romper con la coalición de gobierno de la presidenta izquierdista Dilma Rousseff, dijo la asesoría de prensa del vicepresidente Michel Temer, que lidera esa fuerza.
Para lograr consenso, la dirección del PMDB podría dejar plazo hasta el 12 de abril a los ministros de ese partido para dejar sus cargos.
"Ya hay una amplia mayoría favorable a romper con el gobierno", dijo el martes un vocero de Temer a la AFP.
"Lo que efectivamente se está buscando hacer es que mañana el partido tome la posición [de dejar la coalición], pero a aquellos que quieran permanecer en el gobierno se les daría un plazo hasta el 12 de abril, para que todos los del PMDB que ocupan un cargo en el gobierno, lo dejen", añadió.
El Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), con 69 diputados y siete ministros, es el mayor de la coalición de Rousseff, que pertenece al Partido de los Trabajadores (PT).
La partida del PMDB limitaría seriamente la capacidad de la presidenta de resistir al juicio de destitución en su contra que impulsa la oposición en el Congreso, por presunta manipulación de las cuentas públicas.
Si Rousseff es destituida, Temer completaría su mandato hasta 2018. La presidenta denuncia el procedimiento de impeachment como una tentativa de "golpe de Estado".
La jefa de Estado mantenía por su lado consultas con ministros del PMDB, para impedir, según los medios, que los partidarios del impeachment logren unanimidad en la reunión de la dirección de ese partido, que se celebrará el martes en Brasilia.
Por la mañana recibió al ministro de Minas y Energía, Eduardo Braga, una de las pocas figuras del PMDB que defienden públicamente la idea de permanecer en el gobierno.
La crisis brasileña entró en una espiral vertiginosa en las últimas semanas, alimentada por los escándalos de corrupción de la estatal Petrobras y por una recesión económica de escala histórica.